Antes

Las escaleras originales eran rústicas y anticuadas, con una apariencia pesada que encajaba con un estilo clásico o rural, pero que se veía desgastado y no funcional en un contexto moderno. Los materiales de madera envejecida mostraban signos evidentes de deterioro, lo que restaba luminosidad y frescura al espacio.

Después

La cocina ahora tiene un espacio abierto, moderno y funcional. Gracias a la eliminación de paredes, la cocina ahora se integra perfectamente con el comedor y la sala de estar, creando un ambiente más social y luminoso que fomenta la interacción familiar y con invitados.